Quien dijo que el tiempo no se recupera, no conocía la tecnología láser, porque gracias a esta intervención de la ciencia empleada ampliamente en el mundo de la cosmética, es cada vez más sencillo luchar contra el paso del tiempo en la piel de la cara, cuello, escote y hasta las manos, donde primero comienzan a aparecer las arrugas y manchas que acompañan la entrada en años.
Por lo general, el láser utilizado es de CO2 fraccionado, el cual rompe las capas dañadas de la piel, permitiendo el crecimiento de nueva piel saludable y con apariencia más joven, asimismo, estimula la producción de colágeno y elastina al penetrar hasta capas profundas de la epidermis.
Este tratamiento innovador, llega a sustituir el antiguo láser llamado resurfacing, el cual se empleaban los cirujanos plásticos en quirófanos, y a pesar de que tenía resultados excelentes, era muy agresivo con la piel al realizar toda una abrasión en la zona de la cara, que dejaba al paciente imposibilitado de hacer su vida normal por algunos 20 días de reposo.
La diferencia con este nuevo láser fraccionado, es que se pueden realizar pequeñas sesiones más seguidas y no se requiere que el paciente deba tomar reposo en casa para que pueda comenzar a notar los cambios en la piel. Solo un enrojecimiento temporal por pocos días, será el resultado de cada sesión, lo que resulta perfecto si no quieres decirle a nadie que te has hecho un tratamiento rejuvenecedor, ya que puedes tener la excusa de que esas mejillas sonrojadas son producto de un día de playa.
La cantidad de sesiones, dependerá de qué tan marcados están los signos de la edad en la piel del paciente y qué tan delicada sea esta, con una duración promedio de 30 a 40 minutos por sesión. Por lo que se recomienda siempre acudir a un médico especialista, quien está en la facultad de determinar cuál es la necesidad con el láser de cada paciente.
Con este tratamiento rejuvenecedor, es posible eliminar pequeños surcos en la piel, poros abiertos, líneas de expresión nacientes, cicatrices dejadas por el acné, puntos negros y blancos, así como darle uniformidad a la pigmentación de la piel, por lo que podrás ahorrar un poco en maquillaje, ya que no necesitarás usar las mismas cantidades de base o de polvos para poder tener el mismo tono en toda la cara.
Aunque suena contradictorio, el objetivo del tratamiento rejuvenecedor con láser es provocar un daño en la piel, pero es un daño selectivo, donde se produce una quemadura, una rotura del colágeno y que sea la propia piel del paciente la que tenga que regenerar ese daño, por ello la función del láser fraccionado, está en hacer pequeñas quemaduras en la piel, en un patrón definido, por lo que no se trata toda la superficie de la piel en una sola sesión.
Paulatinamente el paciente experimentará cómo estas capas se van cayendo como sucede en la descamación de la piel con un peeling, pero de una forma muy sutil en la que parecerá que te recuperas de una quemadura solar.
Es importante que si la paciente es femenina, acuda a la cita para su tratamiento con láser completamente libre de maquillaje, ya que este contiene colores y como el láser se trata de luz, este color impide que penetre hasta las capas profundas de la piel. 
Dependiendo del lugar donde se realice el tratamiento y de la modernidad del equipo de láser usado, se pueden emplear dos cosas para reducir las molestias de la quemadura que hace el láser. Una opción es colocar una crema anestésica local mientras se utiliza el láser, y otra es acompañar la aplicación de la pistola que emite la luz del láser con otra que arroje mucho aire frío que refresque la zona durante toda la sesión.
Una vez finalizada la sesión de aplicación del láser fragmentado para rejuvenecer la piel, se debe aplicar una crema hidratante que ayude a inicia el proceso de regeneración del daño. Este paso, según refieren los pacientes, causa un ardor intenso pero momentáneo, porque es el momento en el que la piel que ha sido dañada por el láser entra en contacto con otra sustancia, sin embargo no es para alarmarse, es un efecto secundario habitual en este procedimiento.
De acuerdo con los expertos, los resultados en pleno del láser fraccionado se notan 3 meses después de la aplicación de la primera sesión, cuando la piel termina de regenerarse por completo.